Ya lo colgué.
Queda muy bonito sobre la pared que pinté de rojo.
Este también lo colgué.
Quería regalarlo pero pensé que estaría mejor en mi pared que en la suya.
Y sobre la única mesa que he montado, me coloqué alguna cosita recogida de mi patio.
Esto ya me va pareciendo un espacio más en condiciones de habitabilidad.
Ya he vuelto!!!
Y ya estoy medio aposentada en mi nueva casa aunque todavía lejos de esos cien días de los que hablan como necesarios para habituarnos a un nuevo espacio.
Llegué a una casa vacía y me entretuve con la cámara frente al espejo olvidado que habían dejado apoyado en la pared de una de las habitaciones.
Luego vi un rollo de papel abandonado en el rincón. Lo abrí y... sorpresa!!! parece como si alguien hubiera querido dejarlo allí para que yo lo encontrara. Lo que son las coincidencias... todavía estoy alucinada con el hallazgo...
Hace dos días busqué una madera, lo pegué en ella y le monté un marco.
Solo queda colgarlo en esa misma habitación, una habitación que empezó a ser mágica a partir del momento en que lo encontré.
